El senador José Miguel Durana valoró la importancia de los cambios introducidos al Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), a través de los cuales se facilitará su acceso y se ampliará la cobertura de beneficiados, al eliminar el requisito de vulnerabilidad basado en el Instrumento de Caracterización Socioeconómica, requiriendo solo integrar el Registro Social de Hogares.
Durante el debate, el parlamentario gremialista hizo hincapié en que el gobierno redobló sus esfuerzos respecto de este proyecto que en su primera etapa alcanzó a más de un millón cien mil hogares de Chile. “Este beneficio ya fue ampliado en el mes de junio del presente año, alcanzando su cobertura a más de dos millones de beneficiarios”.
Destacó que este beneficio se amplía una vez más, flexibilizando los requisitos, los cuales se circunscriben a dos parámetros como son cumplir con el registro social de hogares y acreditar, mediante una declaración de los propios beneficiarios, la no percepción o la disminución de rentas.
El legislador también recalcó que esta nueva medida agrega a los beneficiarios del Aporte Previsional Solidario. “Hace algunos días hice un llamado al gobierno a ampliar la cobertura de estos beneficios, lo cual hoy se hace en gran parte realidad. Celebro este hecho que es una ayuda efectiva frente a la pandemia y con responsabilidad fiscal”.
Las modificaciones
La iniciativa considera la eliminación del requisito de vulnerabilidad socioeconómica, donde solo se deberá tener Registro Social de Hogares (RSH) y cumplir con el requisito de ingresos formales por debajo del umbral que establece la ley para postular.
Además, se simplifica la manera de acreditar los ingresos formales de los hogares que soliciten y apelen, considerando solo la información declarada por las familias para definir la entrega del beneficio.
En el caso de los pensionados, se incorporó a un grupo que anteriormente no estaba considerado. Los hogares donde reside al menos un adulto mayor con Pensión Básica Solidaria de Vejez (de 70 años o más) y/o al menos un beneficiario de Pensión Básica de Invalidez (PBSI), el IFE asciende a $100 mil al mes por cada uno de estos pensionados y que además de se encuentren dentro del 80% de mayor vulnerabilidad, según la Calificación Socioeconómica del registro.
Además, se aprobó que accedan al IFE los adultos mayores con PBS de vejez desde 65 años y se agregó como beneficiarios a aquellos pensionados que, viviendo en un hogar que no cumple con requisitos de ingreso del IFE, cuenta con RSH y recibe un APS (Aporte Previsional Solidario) de vejez o invalidez, siempre que su pensión final sea igual o inferior a una Pensión Básica Solidaria del mismo tramo de edad.